Última novela de la Trilogía de Depford que, en mi opinión, está muy por debajo de las otras dos. Al igual que me ocurrió con El quinto en discordia, el principio y el final de El mundo de los prodigios me parece muy acertado y es en la parte central donde me hace perder el interés.
Sin embargo, lo que en El quinto en discordia era un bloque central algo menos interesante, en El mundo de los prodigios me ha parecido artificial y farragoso.
Después de leer hace un par de meses _El quinto en discordia, _primer libro de la Trilogía de Deptford, he decidido leer el segundo libro de dicha trilogía: Manticora.
Este libro me ha gustado aún más que el primero, y no creo que tarde en completar la trilogía.
Si la primera parte de la trilogía trababa sobre la historia, ésta trata sobre el mito, la tercera parte tratará sobre la magia.
La misteriosa muerte del magnate canadiense Boy Staunton -al que han encontrado ahogado dentro de su coche en el fondo del puerto de Toronto- ha trastornado a su hijo David, quien al contrario que la policía, está convencido de que su padre fue asesinado. Decidido a librarse de su obsesión, David viaja a Zúrich para psicoanalizarse en el Instituto Jung.
Mi nota: un 5 sobre 5
Tenía pendiente desde hace tiempo leer algún libro de Robertson Davies, escritor del que varias veces he oído hablar muy bien y, en mi ignorancia, era un perfecto desconocido para mí.
Me he decidido por este libro, El quinto en discordia, el primero de la Trilogía Deptford, y considerado uno de los mejores de Davies.
La primera parte del libro, la de la infancia del narrador y donde el protagonista es el pueblo del mismo -Deptford- me ha parecido excepcional, recórdandome un poco a Faulkner; pero después he perdido un poco el interés en la historia, aunque el libro en su totalidad está muy bien escrito; y la última parte del libro -donde se cierra toda la historia y todo lo anterior cobra sentido- me ha vuelto a enganchar.
En resumen, me ha gustado mucho, aunque no he disfrutado todo el libro tanto como las primeras 80-100 páginas. Pero sin duda volveré a leer a Davies, quizás pruebe con la segunda parte de esta trilogía.
Mi nota: un 4 sobre 5